- Área: 80 m²
- Año: 2011
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Fotografías:Francisco Nogueira , Teresa Otto, Diogo Aguiar
Descripción enviada por el equipo del proyecto. A pesar de su evidente valor arquitectónico e histórico, y su ubicación central en la ciudad de Lisboa, la plaza de S. Paulo ha sido un lugar de paso en el camino hacia los clubes y bares en el centro de la ciudad, paradójicamente marginal y desértico.
Aprovechando las celebraciones del santo patrono de la ciudad - San Antonio - que tienen lugar durante todo el mes de junio, la asociación cultural de parafernalia se unió a la Ordem dos Arquitectos con el fin de revitalizar y reactivar este sitio colocándolo de nuevo en el rutas de la ciudad.
La idea era que la intervención se centrará principalmente en un escenario atractivo para que fuera una plataforma para los artistas invitados a actuar. Debía ser un único objeto de bajo costo con la capacidad de ser el motor de este nuevo centro de eventos culturales - una pieza temporal que sería la estrella tanto de la plaza como de las fiestas, con gran capacidad para acoger no sólo conciertos populares, sino también conciertos de rock, música del mundo, noches de fado y DJs.
A pesar de la escasez de recursos y la escala volumétrica gran deseada para el escenario, esta estructura ligera (hecha de elementos prefabricados modulares) fue diseñada para imponerse como un catalizador urbano icónico, conservando y respetando la jerarquía espacial ya consolidada de la plaza. Además, es un proyecto que aprovecha el uso del color como activador urbano, ya que contrasta con el color tenue de la ciudad vieja.
La parte delantera del escenario se asemeja a un edificio histórico de la "Casa dos Bicos", muy próxima, y también a los globos típicos de las fiestas de San Antonio. Sus formas escénicas fueron alcanzadas por la superposición de estructuras estándar recubiertas de material textil teñido de rojo.
Considerando la implantación dada, la caja escénica en sí fue diseñada para ser intangible y que pudiera mezclarse con la gente y la ciudad. Ya que es sólo una cubierta para la lluvia, que es transparente (plástico), permite que el monumento histórico detrás de él - Iglesia de St. Paul - sea parte de la intervención y totalmente visible desde toda la plaza
Durante el día, la luz del sol de Lisboa hace que el resplandor rojo de la tela revele las proyecciones expresivas de las sombras de la estructura. Por la noche, cuando comienzan los espectáculos, el escenario se ilumina en un marco de sinuosas luces. Siendo utilizable durante todo el mes por todos los de la comunidad local, este proyecto fue una acción temporal que se espera que permanezca en el tiempo.